Capitulo 1

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Capitulo número 1: “El destino”

En un asilo de huérfanas, había chicas de todas las edades. Había una regla la cual todas debían respetar “cumplido los veinte años se le asignará un trabajo” obviamente esto implicada que le pagaran y pudiera comprar algo donde vivir. Así fue que Emilia una de las chicas las cual había cumplido el veinte de marzo los veinte años, le asignaron un trabajo de mucama en una casa de personas muy ricas.

Julia: Bueno a ver chiquita, podes empezar por el cuarto de mi hijo.

Emilia: ¿Dónde es?

Julia: La tercera del lado derecho, arriba.

Emilia: Gracias y para esta noche cuantos son para cenar?

Julia: Viene mi hijo y se va a quedar un tiempo acá, por que se peleó con la novia.

Emilia: Esta bien, suerte. (Sube al cuarto y empieza a ordenar, sigue por el baño de la habitación)

Nicolas: (Entró a la habitación y al escuchar ruido en el baño dijo) ¿Quién esta ahí?

Emilia: Disculpe… (Sale) Estaba… (Se queda mirándolo) yo…limpiando.

Nicolas: (Se ríe) ¿Yo limpiando?

Emilia: Es que… (Reacciona) No hablo mal, no seré muy inteligente como usted pero algo…

Nicolas: (Le sonríe) ¿Quién sos?

Emilia: Disculpe no me presente…soy Emilia, la nueva mucama. (Le da la mano)

Nicolas: (La toma y la saluda) Un gusto, soy Nicolás.

Emilia: El gusto es mió, supongo que es el hijo de la señora Julia. No?

Nicolas: Así es, bueno yo no te molesto me quedo acá mirando tele.

Emilia: No, no lo molesto yo…después vengo.

Nicolas: Por favor, quédate (Le sonríe)

Emilia: Esta bien, le prometo que no lo voy a molestar.

Nicolas: No tenes que prometer nada, linda…

Emilia: (Lo mira sorprendida por lo que le había dicho)

Nicolas: Perdón si te incomodo lo que te dije.

Emilia: No para nada, pero gracias.

Nicolas: (Le sonríe y se acuesta en la cama)

Emilia: (Limpia los muebles, y cuando podía lo miraba)

Nicolas: ¡Uy empezó Next!

Emilia: ¿Lo ve?

Nicolas: Me encanta, vos?

Emilia: También me encanta.

Nicolas: Que bueno que nos encante (Ríe)

Emilia: (También se ríe) Disculpe, ahora sigo…

Nicolas: No te preocupes.

Emilia: (Sigue limpiando)

Julia: (Golpea la puerta y ve a Nico) ¡Hijo!

Nicolas: Mamá. ¿Cómo estás? (La saluda)

Julia: Emilia por que no vas a limpiar otro lado no vez que esta Nico?

Emilia: Discul…

Nicolas: (La interrumpe) Yo le dije que se quedara, ella no tiene la culpa.

Julia: Igual anda a limpiar otro lado.

Emilia: (Agarra el trapo, sale y se queda escuchando)

Nicolas: ¿Por qué la tratas así mamá?

Julia: ¡Es una mucama!

Nicolas: No tenes derecho, es una chica y muy linda.

Julia: ¿Hijo no me digas que te gusta la mucamita? (Con asco)

Emilia: (Sonríe)

Nicolas: Mamá. No me gusta, además recién la conozco.

Emilia: (Se va)

Julia: Menos mal, no te le acerques mucho igual.

Nicolas: ¡Que mala que sos!

Julia: No es de mala, somos de distintas clases sociales.

Nicolas: No me interesa, mira si vas a empezar a cuestionarme me voy a otro lado y punto.

Julia: No, hijo. (Lo abraza)

Nicolas: ¿Papá?

Julia: Ahora viene en un rato, se quedo en una reunión. Me voy a bañar.

Nicolas: Ah, ok. Voy a la cocina a comer algo. (Baja)

Emilia: (Estaba poniendo la mesa y tarareando una canción)

Nicolas: (Entra y se la queda escuchando)

Emilia: (Lo ve y se calla) Disculpe.

Nicolas: No por favor, seguí.

Emilia: ¡Que vergüenza!

Nicolas: Parece que hoy estamos destinados a vernos.

Emilia: Si… (Con timidez)

Nicolas: Te pido disculpas de parte de mi mamá que te trató algo mal.

Emilia: Gracias. (Le sonríe) Es muy bueno!

Nicolas: (Le guiña el ojo y agarra agua de la heladera)

Emilia: Deje que yo le sirvo (Agarra la jarra)

Nicolas: Gracias, pero puedo.

Emilia: (Le trae un vaso) Ahí tiene.

Nicolas: Gracias, sos muy eficiente… ¿Cómo te conoció mi mamá?

Emilia: Vengo de un asilo y cuando cumplimos veinte años, nos asignan trabajos y bueno…acá estoy.

Nicolas: Así que tenes veinte años…sos una nena.

Emilia: Tampoco me haga quedar tan mal, usted también es un nene.

Nicolas: No yo tengo veintiséis años, te llevo seis años.

Emilia: Es poquito! (Lo mira)

Nicolas: Perdón por la pregunta que voy a hacer, pero…tenes novio?

Emilia: No…en un asilo de huérfanas, somos todas chicas.

Nicolas: ¿Y novia? (Riéndose)

Emilia: Ay hombre, que pregunta…

Nicolas: ¿Tenes?

Emilia: No.

Nicolas: Y al cumplir los veinte supongo al salir a lo que es “el mundo” algún chico debes haber visto.

Emilia: Si…pero salí ayer.

Nicolas: Entonces viste alguno ya (Haciéndose el galán)

Emilia: No se haga ilusiones, no y si…es imposible.

Nicolas: Nada es imposible (Le sonríe, toma el agua y se va)

Emilia ¿Qué me querrá haber decido con eso? (Termina de poner la mesa)

La familia se sienta a cenar mientras que Emilia servia la comida.

Alejo: ¿Sos nueva chiquita?

Emilia: Si (Sirviéndole el agua)

Alejo: Ahí esta bien…

Julia: ¿Limpiaste el sótano?

Emilia: No, me dijo que lo limpiara señora.

Julia: Tendrías que haberte dado cuenta sola, para eso trabajas.

Emilia: Disculpe, tampoco sabía donde era… (Mira el piso)

Julia: Un sótano siempre esta abajo, es obvio.

Nicolas: ¡Bueno córtala mamá! ¿Podes dejar de tratarla mal?

Julia: Pero…

Nicolas: Pero nada córtala, es un ser humano y merece respeto.

Emilia: (Lo mira como diciendo gracias)

Después de cenar todos se van a dormir menos Nico y Emi.

Emilia: (Lavaba los platos y cantaba una canción bajito)

Nicolas: (Entra, se sienta y se la queda escuchando)

Emilia: (Se da vuelta para agarrar un repasador) ¿Me espiaba?

Nicolas: Si…

Emilia: Estoy trabajando si eso es lo que mira.

Nicolas: No, confío en vos.

Emilia: (Le sonríe) Gracias por lo que hizo hoy.

Nicolas: Es lo que tenía que hacer, lo sentí.

Emilia: Devuelta gracias, es muy bueno usted.

Nicolas: Y vos me caes muy bien…hablamos?

Emilia: No se enoje, pero no puedo.

Nicolas: ¿Por qué?

Emilia: Me encantaría, pero hay una regla que dice que no puedo hablar de cosas que no sean de trabajo con los dueños o hijos.

Nicolas: Rompamos las reglas!

Emilia: (Le sonríe) Ojala.

Nicolas: ¿Dónde están las reglas?

Emilia: No las tengo! (Ríe)

Nicolas: Y bueno hagamos las cosas mal.